Al mal tiempo buena cara

A pesar de que la tormenta tropical "Fay", que tocó tierra ayer en la costa suroeste de Florida no se convirtió en huracán como en un principio habían vaticinado algunos expertos, nos impactó con vientos y bastante lluvia-al menos en el patio de mi casa.

Para bendición nuestra, Fay trasladó su ojo al otro lado de la península floridana y en nuestra área presentó vientos máximos sostenidos de 95 kilómetros por hora, con ráfagas fuertes.

Se ha reportado que las intensas lluvias han causado inundaciones en el centro-sur de Florida y peligrosos deslizamientos de tierra. En casa, gracias a Dios, sólo tuvimos algunas ramas de árboles partidas y bastante agua.

Anoche cuando comenzaron los vientos, decidimos abrir las puertas posteriores de los corrales que están a cada lado de la casa, para que los caballos pudieran estar juntos y protegerse de cualquier eventualidad. Los 8 perros se refugiaron el el garaje sin problema.

Eso sí, entre la lluvia y los caballos corriendo de lado a lado por toda la parte de posterior del patio, acabaron con la yerba y lo que quedó fue un lodazal y tremendo cagazón. Literalmente...porque se cagaron hasta en la terraza los muy sinverguenzas.

Todavía está lloviendo fuerte y como pueden ver, no se salvaron ni las palomas que nos visitan para robarle la comida a los caballos.

Y a mi, me llamaron del hospital para que me presentara a trabajar...

como si en casa que somos 6 personas,

5 caballos y 8 perros no hubiera nada que hacer!